¿Por qué a tanta gente se le complica aprender inglés?

3. Falta de práctica

La práctica es una de las claves más importantes para aprender un idioma. La mayoría de las personas que toman cursos de inglés no dedican tiempo suficiente fuera de la clase para practicar. Al principio, cumplir con las tareas que deja el profesor y repasar el material puede ser suficiente, pero a medida que avanzas, es crucial que aumentes el tiempo que dedicas a hablar y practicar el idioma.

Muchos estudiantes se estancan en un nivel intermedio porque no tienen el hábito de practicar inglés diariamente fuera del aula. Para dar ese salto al siguiente nivel, necesitarás compromiso y constancia. Incorporar el inglés en tu vida diaria, ya sea hablando con otros, viendo contenido en inglés o escribiendo, es fundamental para avanzar y alcanzar fluidez.

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4. El nivel del curso no es adecuado 

En muchos cursos, especialmente en las secundarias y preparatorias, los estudiantes pueden pasar semanas, meses o incluso un semestre completo repasando los mismos temas en el nivel básico (esto puede ocurrir también en otros niveles). Por esta razón, muchos alumnos se rehúsan a inscribirse en un nivel básico, incluso cuando no son capaces de hablar el idioma con fluidez; simplemente están cansados de repetir lo mismo. Sin embargo, es crucial recordar que haber visto un tema no equivale a dominarlo. Por lo tanto, no intentes ingresar a un nivel más avanzado que no se corresponda con tus habilidades actuales. En un curso más avanzado, podrías seguir el material al principio, pero eventualmente te quedarás rezagado, especialmente en habilidades clave como la expresión oral. El nivel del curso debe ajustarse a las habilidades del estudiante, y el curso en sí debe ser de calidad, lo cual nos lleva al siguiente punto.

5. El Rol de la Calidad del Curso

A veces, el problema no está en el estudiante, sino en el curso o el maestro. Con la proliferación de escuelas, cursos presenciales, en línea y maestros particulares, es fácil caer en la trampa de programas de baja calidad. Muchos cursos son impartidos por personas que han alcanzado un nivel intermedio bajo (B1) en inglés y comienzan a enseñar por costos muy bajos. Estos instructores a menudo carecen de un conocimiento profundo del idioma y de técnicas pedagógicas adecuadas.

Incluso cuando un maestro tiene un certificado o un curso es ofrecido por una escuela reconocida, no siempre es fácil para los estudiantes, especialmente los principiantes, distinguir entre un buen y un mal maestro. Esto puede llevar a una pérdida de tiempo y dinero si el curso no cumple con los estándares de calidad.

Es fundamental investigar antes de elegir un curso. Busca recomendaciones de amigos o colegas que hayan alcanzado un buen nivel de inglés. Lee reseñas de las escuelas, toma clases de muestra si es posible, y ten en mente tus objetivos a largo plazo, no solo el costo o las promociones. Recuerda, un precio alto no siempre garantiza calidad, y un precio bajo puede ser una señal de advertencia.