Clases en grupo vs individuales personalizadas. ¿Cuál te puede dar mejores resultados?

El tamaño del grupo: La clave para un buen aprendizaje

La principal ventaja de un curso grupal es que es más económico que uno individual. Entre más grande sea el grupo, más barato se volverá pues el costo se repartirá entre 20, 30 o más estudiantes, haciéndolo una opción accesible para aprender un nuevo idioma.

Pero esta misma característica es su mayor desventaja, porque en los grupos grandes, los estudiantes no reciben atención efectiva del maestro ni tiempo de calidad para practicar y aunque son más baratos, te costará tiempo y dinero cuando necesites pagar practica adicional de conversación para obtener un buen resultado. También puedes practicar con amigos, pero si la práctica no es guiada por un maestro profesional, aunque tu fluidez aumente, tus errores no se corregirán y tu nivel no mejorará.

Esto no quiere decir que en un grupo grande no aprenderás, solo significa que será un curso mayormente teórico y es casi seguro que te encontrarás más tiempo escuchando que practicando, lo que puede frenar tu progreso.

Entonces, ¿cuál es el tamaño ideal de un grupo donde obtienes el mejor valor por tu dinero y puedes practicar sin sacrificar la calidad?

En materias teóricas como filosofía o historia, diez o cincuenta alumnos no hacen la diferencia, pero en materias prácticas como los idiomas, la práctica es fundamental. “Saber inglés pero que solo te falte hablar» no te servirá de nada si te necesitas certificar.

El punto óptimo donde un grupo tiene la mejor relación calidad-precio, tiempo de calidad para práctica conversacional y atención personalizada del maestro para dudas y correcciones es de 10 a 12 estudiantes. Con éste enfoque personalizado podrás acelerar tu aprendizaje y lograr la fluidez más rápidamente.

Claro que grupos más pequeños entre 3 y 5 personas ofrecen el máximo tiempo de práctica pero también, un costo más elevado porque se divide entre pocas personas.

La intensidad del grupo: El mito de una mayor velocidad

Si buscas un curso donde puedas llegar a nivel avanzado en el menor tiempo posible, es normal pensar en un grupo intensivo que tenga más horas por semana. Sin embargo, “la intensidad” de un grupo no es el único factor que determina la velocidad del curso, de hecho, el tamaño del grupo no solo repercute en cuánta práctica tendrás, sino también en la velocidad del grupo.

Para ilustrar este punto, imagina dos grupos:

Grupo A: Grupo grande con 30 alumnos y 2 horas de clase de lunes a viernes.

Grupo B: Grupo pequeño con 10 alumnos y 1 hora de clase de lunes a viernes.

Ya sabemos en qué grupo practicarás más, pero ¿en cuál progresarás más rápido?

El grupo pequeño aprovecha mejor el tiempo, ya que cada estudiante tiene más oportunidad para practicar y dominar el idioma en menos tiempo. De hecho, es probable que el grupo chico avance igual de rápido que el grande, a pesar de tener menos horas de clase, simplemente porque elimina a 20 personas adicionales que no practicarán. Y aunque el grupo grande cubra los temas rápido, de poco sirve si sus estudiantes terminan el curso sin poder hablar el idioma.

Y es que para alcanzar un nivel avanzado en un idioma necesitarás práctica, mucha práctica. Por eso muchas escuelas con grupos con demasiadas personas recurren a cursos intensivos, ya que no pueden ofrecer suficiente práctica en pocas horas, además de que los cursos intensivos son más caros.

Como puedes ver, la velocidad de un curso no solo depende de “qué tan intensivo” es el grupo ni de cuántas horas pasas en clase, sino de la calidad de esas horas. Y esa calidad depende en gran medida del tamaño del grupo, que afecta tanto la cantidad de práctica como velocidad de tu progreso.

Por eso los estándares internacionales hablan de horas efectivas de clase, porque saben que no se trata solo de cursar horas por cursar, sino de cuánto vas a practicar. Si deseas saber más de los estándares internacionales, te recomiendo nuestro artículo: ¿Qué son los niveles internacionales de idiomas y cómo determinar el tuyo?

El nivel del grupo: Verifica que estés en el grupo correcto

Entras a tu nueva clase de idiomas, emocionado por comenzar. Pero a medida que la lección avanza, te das cuenta de que algo está mal. Algunos compañeros se expresan sin problema, mientras que otros se esfuerzan para hablar.

Cuando te colocan en un grupo con niveles muy disparejos, tu motivación se pueden afectar. Si el material es muy fácil, puedes sentirte aburrido y desconectado. Si es demasiado difícil, puedes sentirte desanimado.

Por eso, solicita una evaluación o examen de colocación para tener una idea clara de tu nivel, sobre todo en la expresión oral, que suele ser el origen del problema. Y sin importar la cantidad de años que has estudiado, evita autoevaluarte si no estás capacitado para hacerlo. Si no crees que la evaluación es correcta, solicita una clase muestra y pruébate con el grupo potencial. Si la diferencia es grande, explora otros grupos que estén alineados con tu nivel.

Recuerda, incluso el grupo más perfectamente alineado, siempre tendrá variación de nivel. Esto es bueno y enriquece tu experiencia, si aprendes de compañeros que tienen diferentes fortalezas. Si quieres un curso que se ajuste completamente a tu nivel sin necesidad de un examen de colocación, los cursos individuales serán tu mejor opción.